domingo, 17 de febrero de 2013



LOS CUATRO HIJOS DE HORUS

Las cuatro aves que se sueltan en la coronación de Horus rey llevan los nombres y las cabezas distintivas de los cuatro hijos de Horus, protectores de los cuatro órganos principales del cuerpo y custodiados a su vez por cuatro divinidades protectoras femeninas. Cada una vuela hacia uno de los puntos cardinales, que aparecen en el siguiente orden:

Imset: Se dirige hacia el Sur y anuncia a las divinidades meridionales que Horus (el rey) ha tomado la corona blanca y la ha unido con la roja. Imset con cabeza humana, es el protector del hígado y se encuentra bajo la custodia de Isis, que según  los Textos de las pirámides, 1255, viene del Oeste.

Hapi: va al Norte y les comunica a las divinidades septentrionales que Horus (el rey) ha tomado la corona blanca y la ha unido con la roja. Hapi, con cabeza de babuino, es el protector de los pulmones, y se encuentra bajo la custodia de Neftis, que según la misma fuente viene del Este.

Dua-mut-f: va al Oeste y les comunica a las divinidades Occidentales que Horus (el rey) ha tomado la corona blanca y la ha unido con la roja. Dua-mut-f, con cabeza de perro o chacal, es el protector del estómago y lo custodia Neith, divinidad del tejido y de la corona roja del Norte.

Kebehsenuf: va al Este y les comunica a las divinidades Orientales que Horus (el rey) ha tomado la corona blanca y la ha unido con la roja. Kebehsenuf, con cabeza de halcón, es protector de los intestinos, y lo custodia Selket, la diosa escorpión, llamada "la que hace respirar a la garganta" y a quien se asocia con la corona blanca del Sur (Textos de las pirámides, 1375).

Esta distribución sugerida por los textos, coincide con la de las divinidades femeninas que rodean la urna canope exterior, de madera sobredorada, de la tumba de Tutankamón. Las funciones que corresponden a estas divinidades son las siguientes:

Imset, con cabeza humana, protector del higado, custodiado por Isis en el Oeste, es el despensero por excelencia. Con los materiales que recibe el estómago (que precede al hígado) almacena los elementos necesarios para la fabricación de azúcares, grasas, albúminas y urea. Ahorrativo, separa el hierro de los corpúsculos rojos para volver a utilizarlo en un momento dado, y transforma la hemoglobina en bilirrubina, el pigmento que da color a la bilis que segrega en grandes cantidades. Por último va al Sur para llevar a Kebehsenuf, guardián de los intestinos, la bilis indispensable para la digestión y la excreción, una importante antitoxina. 

Kebehsenuf, con cabeza de halcón, preside la producción del quilo blanco en el intestino, bajo la custodia del escorpión Selket del Sur, que debido a sus cuidados maternales, es asimilada a veces con Isis. Sus crías nacen rodeadas por una delgada membrana, y cuando la madre las libera se cuelgan de su lomo, donde triplican su volumen alimentándose únicamente por ósmosis. Además la función que realiza el intestino, la de separar los alimentos asimilable de los productos de desecho, requiere gran sensibilidad, para la que ha de desarrollarse un sistema reflejo de defensa. El veneno del escorpión ataca el sistema nervioso, constituyendo un ejemplo de analogía simbólica. Kebehsenuf envía el quilo blanco desde el Sur al Este, a la vena subclavia izquierda. Hapi, con Neftis, del Este, protege los pulmones. Resulta difícil comprender por qué se le otorga cabeza de babuino, el animal sagrado de Thot, señor del tiempo, si su nombre no nos da la explicación. Hap equivale al verbo "circular". Como siempre se dejaba el corazón en su sitio al embalsamar el cadáver, se tomaban los pulmones como símbolo del torrente sanguíneo, cuyo ritmo (pulsación y respiración) regulaba Hapi. Este recibe el fluido linfático blanco que transportan los vasos del canal torácico despositándolo en la vena subclavia izquierda, donde se mezcla con la sangre roja y participa con ella en el intercambio de gas y la oxigenación que se producen en los pulmones. El símbolo de la unión del rojo y el blanco es el signo jeroglífico sma, que representa los pulmones suspendidos al extremo de la tráquea, alrededor de la cual se anudan las plantas del Norte y el Sur, resaltando el carácter vegetal de la función respiratoria. 

Dua-mut-f, con cabeza de perro o chacal, protege el estómago bajo la custodia de Neith, divinidad del Norte y del tejido. El perro desempeña la tarea de transformar lo que en principio era materia extraña en sustancia viva bajo la influencia de ciertas secreciones. Este animal destaca por su sentido del olfato, que recuerda el papel que juegan los olores en la estimulación de la secreción de los jugos necesarios para la digestión. Además, el chacal tiene la particularidad de comer carne en estado de descomposición, y es él el maestro soberano de la momificación, cuyo objetivo fundamental consiste en evitar la putrefacción.

En el sarcófago de cuarcita aparecen las mismas divinidades, agrupadas en este caso por parejas: Isis y Neftis del lado de la cabeza, Neith y Selket del de los pies. En esta distribución se emparejan las orientaciones opuestas y las funciones complementarias:
  • Al Norte, el estómago recibe elementos del exterior y digiere bajo la custodia de Neith.
  • Al Sur, el intestino digiere y arroja elementos al exterior bajo la custodia de Selket.
  • Al Este, en los pulmones, la hemoglobina (roja) es aeróbica con Neftis.
  • Al Oeste, en el hígado, la bilirrubina (verde) es anaeróbica, con Isis.